miércoles, agosto 30, 2006

Ser o no Ser...

Honestamente, cuando decidí crear Moizefala Desdichada – nombre que dicho sea de paso lo “tome” prestado de un corto de Germán Bobe, en el cual “actúa” Álvaro Henríquez y que lleva el nombre de un tema de Los Tres, que sale en el disco La Espada & la Pared, pista 8 para ser más especifica (si no lo conoce búsquenlo y escúchelo) - al igual que hoy en día solo tenia la humilde pretensión de escribir lo que se me viniera a mi desquiciada mente, es decir, cosos que me interesa, que me molestan, etc. Pero sin querer dar una orientación política ni ideología ni mucho menos… solo quería escribir.

Pero hace algunos atrás conversando con Ronald (no puedo decir mas de él salvo que es simpático, soltero, exitoso, pero con un pésimo gusto para elegir autos) me di cuenta que si le he dado una orientación a este blogs, el cual yo bautizo como “visión” femenina de las cosas y él llamo “Feminismo”
¿Feminista yo? Esa pregunta ronda mis pensamientos, la verdad es que a mis cortos 25 añitos se me ha acusado de muchos crímenes pero hasta ahora nunca se me había imputado el de feminista, adjetivo que no lo encuentro un insulto, quizás solo algo exagerado.

¿Feminista yo? Yo? Que estoy tan criada en un mundo de machos y de otros que no lo son tantos, Yo? Que lidio día a día con ellos, con él a quien tanto quiero.
¿Soy Feminista? La verdad es que no lo había pensado tan detenidamente como ahora, no había tomado conciencia de ellos, más bien, siempre me había considerado Machista, aunque con una visión diferentes, quizás un poco más romántica, en el sentido que me encantan los hombres educados, con buen vocabularios, de esos que te sorprenden con pequeños pero significativos detalles, de esos que según mi opinión quedan pocos (sorry pero además soy una mujer de poca fe).

Que difícil ¿soy o no soy? Ese es el dilema, algo hay de aquello que este buen hombre me imputa, pues me pongo “extrema” cuando “atacan” mi genero, cuando veo abuso, cuando nos subestiman.

Pero quiero a los hombres, quiero a mi hombre, creo en esa complicidad exquisita que se da entre géneros, creo en la amistad entre hombre y mujer, admiro a varios hombres, a mis amigos y a ti Jorge… te admiro.

Seguiré escribiendo en este espacio, en mi espacio, seguiré divagando en los caminos de mi cotidianeidad y en la del respetado club de Lulu, total ¿Qué más da? Total da lo mismo, pues solo escribo como la necia que soy, solo escribo para no morir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Supongo que eres muy joven, pues sólo así entendería (mas no justificaría) que no conozcas el feminismo.
Las feministas también estamos criadas en un mundo de machos y de otros que no lo son tanto.
Las feministas lidiamos con ellos día tras día, con los hombres que queremos y con los que no también.
Las feministas hemos sido educadas en el machismo, por lo que también tenemos un machismo en nosotras, pero nos damos cuenta de ello.
A las feministas nos encantan los hombres amables, ¿por qué no habría de ser así?
Las feministas nos defendemos cuando nos atacan o atacan a otras mujeres, cuando vemos abuso, cuando nos subestiman, y violan y matan, y discriminan y relegan sólo por ser mujeres.
Las feministas también queremos a nuestros hombres, al esposo, amante, concubino o lo que sea; al hijo, al padre, al amigo; pero también a la hermana, a la amiga, a la madre, a aquella mujer a la que me une la más mínima necesidad.
Sólo considerando tu juventud puedo creer que no reconozcas al feminismo cuando lo ves o lo practicas, porque has llegado a un mundo muy diferente al de algunas décadas.
Finalmente no importa mucho si te consideras feminista o no (aunque ayudaría bastante), lo que importa es que en tu actuar lo seas.
Sigue siendo como eres, sigue poniéndote "extrema" cuando veas una injusticia.
Un abrazo